Mil años de historia de caña de azúcar en Motril y la obsesión de D. Francisco Montero por la elaboración de un ron «perfecto» forjaron la leyenda de Ron Montero. Desde sus inicios, en 1963, las premisas siempre han sido las mismas: el uso de aguardientes de caña de óptima calidad y el envejecimiento, sin prisa, en barricas vírgenes de roble americano mediante el sistema tradicional de soleras y criaderas. Convertido en un símbolo emblemático de Granada, Ron Pálido Montero tiene un sabor agradable y seco. Muestra los aromas del genuino ron español: caña de azúcar y roble americano. Beba con moderación, le durará más.

Notas de cata: Color ambarino, brillante y muy limpio. Aroma fino y delicado, alcohol bien integrado. Ligeros recuerdos de caña con notas tostadas. El encuentro es sabroso, ligeros matices melosos con un suave paso de boca. Final de media intensidad.